
Sin embargo la alergia ambiental es más complicada, ya que no podemos evitar la exposición del individuo a las sustancias dispersas en el medio ambiente que le rodean. La alergia ambiental la denominamos dermatitis atópica, ya que en perros se manifiesta con signos y lesiones dermatológicas. La incidencia de la dermatitis atópica en perros se estima en un 20% de la población canina total y una de las razas más afectadas son los bulldog francés, también llamados Frenchies por muchos de sus propietarios.
Mi opinión de estos queridos Frenchies es que están mal hechos, son una patología andante y requieren de muchos cuidados veterinarios. Sorprendentemente a veces encontramos alguno que no tiene problemas alérgicos, respiratorios, oculares o traumatológicos, pero muchos de ellos tienen alguno de estos problemas o incluso todos a la vez. Siempre me he preguntado por qué a pesar de ello, cada vez hay más bulldog francés por todas partes... y es que si les conoces te enamoran. Para mi tienen un caracter ideal para las personas, son inteligentes y sobretodo muy alegres, divertidos y cariñosos.

Esta semana entre todos los pacientes que he atendido en ADERVET, he revisado a tres queridas amigas Frenchies: Cora y Huma y Roma. Llegaron hace ya unos meses con unos terribles problemas de prurito y con graves lesiones que no habían podido ser controladas previamente. Unos meses más tarde, gracias a un protocolo ordenado de diagnóstico y tratamiento y a la colaboración estrecha entre sus propietarios y esta dermatóloga, Cora, Huma y Roma están estables, ya no se rascan, no presentan lesiones y tanto ellas como sus propietarios viven felices.
Me encanta mi trabajo, mi profesión, y lo que más me gusta es poder resolver tantos problemas y devolver la felicidad a mis queridos amigos de 4 patas y a sus propietarios.
Con cariño a todos mis pacientes,
Dra. Carmen Lorente