domingo, 6 de junio de 2010

La importancia de llamarse Pelo

La piel de nuestros animales está cubierta de pelo.
El manto o pelo participa en numerosos procesos:

Termorregulación – es un elemento imprescindible para la conservación de la temperatura corporal tanto en invierno como en verano. Entre el pelo y la piel se forma una capa de aire que permite la existencia de un microclima sobre la piel. Aunque parezca extraño el pelo ayuda a nuestros animales a protegerse del calor. Para ello es imprescindible que el pelo se encuentre limpio y sin nudos. Un manto con nudos o acúmulos de pelo muerto imposibilita la buena termorregulación del animal. Hay que tener en cuenta que los perros no “sudan” como las personas.

Barrera – evita el contacto directo de la piel con el medio externo, lo que disminuye la posibilidad de contacto con numerosas sustancias que podrían ser nocivas.

Mimetismo – el manto, sobretodo en animales salvajes es una forma de mimetizarse con el medio ambiente. Como ejemplo la capa blanca de los animales polares.

Comunicación – a través de secreciones y del erizado del pelo el animal trasmite a sus congéneres su estado de ánimo.

Percepción sensorial – existen pelos táctiles, que detectan vibraciones, popularmente "los bigotes"

Por todas estas funciones que realiza el pelo de los animales es importante que se encuentre en unas condiciones higiénicas adecuadas.

Un pelo enmarañado y con nudos puede provocar problemas de piel en nuestro animal y la aparición de dermatitis. El pelo enmarañado no permite una buena transpiración de la piel, eleva la temperatura y la humedad y favorece la multiplicación de microorganismos superficiales que generando infecciones cutáneas.

Los nudos favorecen el acúmulo de suciedad y posibilitan la penetración de cuerpos extraños que pueden provocar serias lesiones en la piel del animal. Los nudos producen molestias en el animal que se manifiestan por picor, además de poder provocar un efecto traumático que desencadene isquemia superficial y la aparición de calvas en las zonas donde había nudos.

Es esencial realizar un cepillado diario del pelo de perros y gatos de pelo largo, para evitar las complicaciones derivadas de un manejo inadecuado. Incluso aunque se recurra a la ayuda de profesionales para mantener un pelaje lustroso y perfecto, es aconsejable realizar un cepillado periódico del mismo en casa y debería ser diario. Cuanto más frecuentemente se realice el cepillado, más fácil será tanto para el propietario como para el animal, ya que lo aceptará como algo gratificante. Si el cepillado se deja para los momentos en que hay nudos, la experiencia puede convertirse en algo desagradable tanto para el animal como para el propietario.   

De cara al verano es imprescindible que el pelo de nuestro animal esté limpio de nudos y bien arreglado, si esto no es posible, deberemos optar por realizar un corte higiénico y dejar que nuestro pequeño pase el sofocante calor del verano de la mejor manera posible.

Dra. Carmen Lorente
Centro de Dermatología Veterinaria ADERVET
http://www.adervet.com/

Cuadro papular de leishmaniosis: un caso clínico

Autor:  Dra. Carmen Lorente, DVM, PhD, DipECVD Anamnesis Hass es un perro mestizo de 18meses de edad y 42 kg. Desde hace 6 mese...